Mi reloj marcaba las nueve menos cuarto, era una noche tibia de esas que te besan la piel. (Mi teléfono suena).
-¿Bueno?-
-¿Qué haces?-
Del más allá llega tu voz, me arrulla, me estremece. Guardo silencio solo unos segundos y te respondo.
-pienso en ti-
Escucho tu respirar, viaja tu aturdida respiración por el cable telefónico, humedece la fibra óptica, eriza los pensamientos nocturnos, lame la curva blanda de mi oreja.
-Quiero verte-
Me dices y tu voz no cuestiona…
Encamino mis pasos voy a tu encuentro, ¿hace cuanto? ¿Dime hace cuanto que no me embriago de ti?
Mis manos tiemblan, esta será la primera vez que tú y yo nos veamos fuera de la cocina, y de nuevo me pregunto, ¿hace cuanto?
Hemos llegado a este encuentro mi hambre de ti, mi sed de ti y yo. En el pequeño café francés esperas, sentado con las piernas cruzadas y tus brazos sosteniendo el deseo. Yo te miro y reconozco el cobalto de tus ojos, tú me miras y reconoces el amor.
Nos hemos quedado sin palabras por unos minutos, tu enfundado en una camisa blanca y vaqueros, yo con el pelo suelto cubriéndome la espalda.
Estamos desnudos, nos vemos por primera vez, veo tus manos, la perfecta armonía de la palma con los dedos, sube mi vista, descansa en tus hombros. Tú acaricias mi pelo suelto y la mesa nos viene grande y el jardín con todas sus criaturas nocturnas nos observan y la vela al centro de la mesa nos ilumina el pensamiento.
Nos interrumpe el joven mesero para preguntarnos.
-¿Té o café?-
Tu que no sabes nada de mi, pides té de jazmín para los dos. Yo que no se nada de ti, sonrío.
Beatrix
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18 comentarios:
¡Caray, B! Cómo extrañaba tus letras frescas, su ritmo apaisado, tu claridad y soltura.
Bienvenida, de nuevo, al mundo de los vivos.
¡Vaya! Qué frescura se encuentra en este texto, el Marvin me ganó la primicia.
Borregata
Gracias Borregata, ya me hacia falta regresar. Y ni creas que se me olvida la ida al Yaqui, cuando asi sea me comprometo a llevarte uno de esos chocolates.
Beatrix
Caramba, justo ayer en la tarde me hice esa pregunta ¿Té o café? No se cuantas veces le di vuelta a la mesa antes de tomar una decisión.
Bea, gracias por darle sabor a las letras, te leo siempre.
Lorak.
Gracias a ti por darte la vuelta por aca, te gusta la nueva casa?
Beatrix
Si, claro que si, hasta cambio el olor; de chocolate a hierbabuena.
Abrazos desvelados.
LoraK
Ahora cacho quien es Dunia ¡Mucho gusto! Yo tengo por mascota una tarántula, se llama Caipirinha. Mmm se me antojó un pisco sour
Borregata
Una tarantula...que quieres que te diga. A pocas cosas le tengo miedo, a las arañas, a las alturas, a los ojos color agua puerca y a los si hubiera. Pero, supongo que cuando nos veamos para ir con el Yaqui ella no viene verdad?
Beatrix
jaja, claro que no viene y ya te contaré la historia de por qué la tengo.
Miedo sólo a no envejecer con dignidad (bueno y muchos otros pero ese es el único con fundamentos)
Borregata
A mi me da miedo, la Bea.
Tarantulón
Miedo? te doy miedo? Me cuesta creerlo, eso dejalo para mi, tu si que me das miedo.
Beatrix
Jajajaja a mi también me da miedo el Abulón, Tiburón, Tarantulón o como se ponga, por cierto Beatrix, mi madre se ha vuelto una adicta a tu cocina y al mate ( ah no, al mate ya era adicta)
Borregata
Pues mira dile que lo celebro, que es bienvenida al rincon de los placeres tibios. Y el mate eh? y quien no va estar adicta al mate! Por cierto no se por que me acorde de Sandro de America...preguntale si tambien le gusta.
Un beso,
Beatrix
Qué albureros son.
TARANTULON ESCRIBE:
Ajajá, con que les da miedito lo de mis seis patas velludas.
Bueno, tienen temperatura eh, lo que sea de cada quien, Tarantulón está afinando su voz para cantarte una canción que lleva su nombre.
beso dulce para Tánita, Tánatos Bean, Tanate BLK y Tánatos Lavanda.
atte
La vanda, de Tarantulón.
pd. A mi tambien me gusta el mate.
CREO QUE VOY A HACER UN CUENTO QUE SE TITULE ASI:
A mi también me gusta el Mate!
Tomás: y si se lo dedico a mi suegra...
Ya estoy teniendo mis dudas si quiero la canción...Y menos cantada por un arácnido aun que tenga buena entonación...
Bety: pero que cachonda eres, ¡sucia! ¡Me encanta!
Eso de las llamadas de media noche y el quiero verte, es una locura, pero que decir, sólo se tiene una vida.
A propósito del gusto por los uniformes, diré, mi ex, es militar, oficial, hace casi un año nos vimos en un café de Coyoacan, como dos amantes fugados, y aunque guarde la compostura, ¡lastima!, se nos miraba como un par de enamorados, solo tomo mi mano.
Las veces que he regresado a ese café, (a la espera de la sorpresa de volverlo a ver), el mesero trae dos cartas y me pregunta:
- ¿Espera a su marido?
Yo siempre respondo, si, lo espero, pero mientras tráeme un café
Quizás algún día...
TU CAMARA...
ESTA MUY BONITA.
TIENE UNA RESOLUCION FINA...
diria yo... apunto de turron.
atte
Tarantulon
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