martes, agosto 14, 2007

Bon Appetit



Mi querida apprenti,

La espero el domingo a las seis y treinta de la tarde, en esta ocasión la cena será servida mas tarde.

La aguardo,

FP

¿Por que será que hoy se me hace el trayecto mas largo? ¿Acaso YG viene manejando mas despacio que de costumbre? ¿Y por que nunca me respondió si aceptaba el menú que le sugerí para la cena de hoy?

-hemos llegado-

Abrió la puerta del automóvil y me encamino hacia la cocina, sin embargo esta vez tardo mucho más en quitarme el antifaz.

-Aguardaba su llegada, luce usted cansada mi pequeña apprenti, ¿acaso no durmió bien? ¿Algo le afligía?-

-No, nada-

-¿entonces, será que la tenia inquieta nuestro encuentro? Por Dios no me mire así, estoy tratando de romper el hielo, estuvimos separados una eternidad, ¿no le pareció así?

-No-

-Por lo visto usted vine preparada para hacerme cenar un suculento plato de monosílabos en salsa muda-

-¡Nunca me respondió a la sugerencia de mi menú, trabaje mucho preparándolo, realizando la elección de los platillos y usted no dijo ni una sola palabra, me quede en espera de una respuesta!-

-Querida usted me conmueve, cuando leí su menú ¿sabe que fue lo primero que se me vino a la mente? Que usted pretendía impresionarme, ¿estoy en lo cierto?

-Lo menos que esperaba de usted era una atención-

-Creo que ambos nos conferimos el mismo pensamiento ¿sabe? Al igual que usted me quede en espera de una respuesta afirmativa de su parte con respecto a mi oferta de trabajo, ¿pero dígame por que estamos discutiendo de esta manera? Me resulta desagradable, no solo el argumento, sino el verme obligado a darle una explicación.-

"En una ocasión un emperador le consulto a Confucio sobre un asunto militar, a lo que Confucio respondió. “efectivamente poseo conocimientos referentes a Tsu (un puesto de carnes) y al Tou (un platillo) pero en asuntos militares desconozco el tema."

Primer Tiempo:

Gaau Ji

Pequeños dumplings en forma de media luna rellenos de cangrejo negro, macerado en vino de arroz, combinado con repollo y jengibre fresco, cebollinas, salsa de soja y ajonjolí tostado.

Segundo Tiempo:

Cha Yip Daam

Huevo de codorniz cocido y marmoleado en hojas tiernas de te negro sobre una hoja de loto.

-¿Usted me pensó no es así? no importa lo que me diga, yo se que me pensó, ese menú me lo confirma, usted quiere sorprenderme. Pero dígame, ¿sabia usted que fue Confucio quien influyo en que se utilizaron los palillos chinos en las mesas en vez de los letales cuchillos? Se imagina usted, gracias a el en la mesa oriental el dedo pulgar juega un papel importantísimo que de otra manera ningún otro instrumento mas le habría conferido, se podría decir que sin el pulgar no se puede comer-.

Claro que no lo pensé, ¡de que rayos habla! Fue el quien menciono que volvería cansado de la sazón francesa, ¿así que, que mejor que comida China? Y si claro que sabia lo de los palillos chinos, como se otras cosas. Y no, no lo pensé.

¿Recuerdas aquella ocasión en que fuimos al barrio chino? Hacia frío y tu venias saliendo de una gripe terrible, entramos al restaurante y ordenaste una sopa para los dos: Ngau Sung Yin Sai Tong en una olla de barro nos trajeron un consomé de carne molida, con clara de huevo simulado finos y delgadísimos cabellos coronado todo por un confité de cilantro fresco. Esa noche descubrí que hablabas chino, el chef salio a saludarte cuando supo que estabas en el restaurante, hablaron por diez minutos y nunca me presentaste, por el contrario era como si no existiera, entonces deje de existir me limite a ver tus manos y tus gesticulaciones, asentaste en repetidas ocasiones y el se despidió de ti y tu volviste tu mirada hacia mi, me sonreíste. Yo no devolví la sonrisa, tú me miraste y dijiste: -No te voy a dar una disculpa, no fue con intención el ignorarte pero hay reglas culturales y hay que respetarlas-

Esa noche me explicaste a detalle la preparación de la sopa y el modo correcto de marinar la carne, antes de incorporarla al consomé, resaltaste la importancia de jamás utilizar pimienta negra en un consume chino pues arruinaría el color y finalmente me insististe en solo utilizar jengibre joven.
De vuelta en casa me baje del auto sin despedirme me de ti, a mi las reglas culturales me valían comino, como también me importaba un carajo saber como preparar correctamente una base de consomé chino.
Y me quede esperando en la puerta que corrieras a mí, ¿espere cuanto tiempo? No lo se, esa noche me quede dormida llorando de rabia. Cuando desperté estabas a mi lado, en la mesita de noche habías dejado una nota diciendo:

-No te voy a pedir disculpas ni a darte una explicación, no hubo nunca intención de ofender-

Y yo te mire tendido en la cama, desnudo, recorrí el tatuaje de tu brazo izquierdo con mi dedo y dibuje un corazón en el, sin abrir los ojos siquiera y de un solo tirón me acercaste a tu boca y la serpiente que habita en tu boca entro sin tropiezo en mis labios y se enrosco en mi lengua.

-Yo la pensé querida. La pensé mas de lo que puede imaginar, París es una ciudad donde usted podría ser muy feliz, aun que estoy convencido que la arrogancia de los franceses terminarían por cansarla. No me ha preguntado siquiera por los víveres que traje de allá, estaba convencido que eso la llenaría de entusiasmo, o por lo menos lo que le he traído a usted, ¿no le da curiosidad?

-No debió molestarse-

-Yo no me molesto, me ocupo que es diferente. ¿En quien pensaba?-

Tercer Tiempo:

Chyun Mei Naam Gwa Tong

Sopa ligera de la región de Sichuan a base de pequeños cubos de calabaza y legumbre china.

Cuarto Tiempo:

Si Jap Chaau Dai Ji

Trío de Callos de Hacha en salsa de fríjol negro y rodajas de chile tailandés

Quinto Tiempo:

Ho Yip Faan

Esferas de arroz y pollo al vapor envueltas en hojas de flor de loto

-Le hice una pregunta, ¿en quien pensaba?

-Pienso en la comida, pienso en la temperatura correcta, pienso en el corte ideal, en eso pienso no tengo tiempo de pensar en nada más mientras cocino.-

¿Por que estoy tan molesta hoy con el? ¿Por que me irrita tanto que me cuestione? No debí volver, que diablos estoy haciendo aquí? esto es una locura, no tengo ni idea de donde estoy, ni quien es este tipo, podría ser un loco, podría desaparecerme y jamás nadie sabría que ocurro conmigo, ¿en que estaba pensando, en que?

-La duda es una agonía no se la recomiendo-

-¿Por que demonios me tienen que vendar los ojos para venir acá? ¿Por que solo conozco sus iniciales y no su nombre completo?-

El se levanta de la silla, camina junto a la mesa sin mirar a la cámara, se aleja, no dice nada, ¿a donde va? Este tipo me va enloquecer.
Una de las paredes de la cocina gira lentamente y el aparece, lo puedo ver a la luz, esta frente a mi, mi corazón palpita aceleradamente, mi mano tiembla y busca el cuchillo, tomo el cuchillo por el mango, mi mano aun en la mesa de preparación, puedo sentir el frío del granito recorrer y entumir mi mano, el da un paso, se adentra en la cocina, se para frente a mi y me mira con esos ojos que he aprendido a necesitar, camina lento en mi dirección, puedo ver su pecho, el color de su piel a través de los primeros dos botones sin abrochar de la camisa blanca, el pelo revuelto, sus pasos son cada vez mas cortos, no hace ruido al andar, su respiración es lo único que se escucha en toda la cocina y este grito ahogado que no quiere salir de mi garganta.

Toma mi mano derecha y sostiene en alto mi mano y el reflejo de la navaja contra la luz arroja destellos, el me acerca a su cuerpo, siento su respiración junto a la mía, siento su aliento, sus ojos encendidos. De un movimiento me hace que suelte el cuchillo y con la mano izquierda me toma de la cintura, me acerca peligrosamente a su cuerpo, y el puede sentir el temblor de mis manos, mi respiración agitada y yo me embriago del perfume que despide su piel, el acerca sus labios a mi hombro derecho y lo besa.

-Y que mas da un nombre ¿en que cambia tener un nombre que no tenerlo? Yo podría decirle por ejemplo que soy Fausto, Federico, Felipe o Francisco, que mi apellido es Pérez, Paredes, Pasos, Portillo o Poullard. Y eso que cambiaria, que le diría eso de mí? no le diría absolutamente nada.
Esta noche usted y yo vamos a hacer un pacto: usted me va querer a mí sin preguntas y yo la voy a adorar a usted sin respuestas. Ahora vaya al cuarto continuo de la cocina y vea lo que he traído, estaré en el comedor aguardando, aguardándola.-


-¡Aun no termino de cocinar!-

El se detiene en la mesa y dándome la espalda me responde:

-El sexto tiempo arruino la perfecta secuencia que había logrado llevar de manera casi magistral. Desconozco los libros a los que usted consulto, pero en ellos usted debió leer que el arroz jamás es servido como un platillo principal. La costumbre marca que el arroz debe ser ofrecido a los comensales solo después de degustar los principales platillos de un festín, festín que como usted sabe debe incluir pato, abulón, cangrejo negro y aleta de tiburón. El arroz considerado por todos, el alimento más humilde solo debe ser ofrecido como relleno en el excepcional caso de que los comensales quedaran con apetito y nunca como un platillo principal ni complementario de una cena, si estuviéramos en épocas imperiales, mi apprenti usted hubiera terminado degollada. Pero para su fortuna yo me limito a ser solo un pequeño dictador comparado a cualquiera de los extintos emperadores chinos.-

El abandona la cocina, se cierra la pared.

Desabrocho la chaqueta tan solo los primeros dos botones, abro una de las solapas y me giro a la cámara, mi mano recorre mi pecho, hurga el encaje francés de mi sostén, abro tan solo un poco la solapa y miro de frente a la cámara antes de ir al cuarto continuo a la cocina, su respiración retumba en las cuatro paredes de la cocina, su húmeda respiración recorre mi espalda, doy un giro y camino hacia la puerta.

Dentro del cuarto hay una caja gris con letras blancas, leo Christian Dior, abro la caja un par de sandalias verdes de piel con entrelazado de piel de pitón y tacón ancho.
Junto a la caja una funda de plástico también en tono gris con letras blancas donde se lee el mismo nombre.
La falda en línea A del vestido verde haciando juego a las sandalias justo arriba de la rodilla, al centro de la falda una serie de pliegues en contra del hilo emulando el tejido de las sandalias.

Afuera me espera YG como siempre, como al parecer siempre lo va hacer, de un gesto me señala el cabello y me entrega una argolla en dorado y diamantes, camino detrás de el mientras agarro mi cabello suelto, el me espera en la mesa, esta vez la mesa es redonda con un mantel de seda en brocado que cae hasta el suelo, en la mesa solo colocado al centro una enorme bandeja en plata, el sentado en su silla sin dejar de mirarme, me pide que me acerque.
Yo me aproximo a el, aun guiada por la mano de YG, de un movimiento le hace una seña y con las dos manos YG me toma de la cintura me eleva y me sienta en la charola al centro de la mesa. Mi piernas abiertas sobresalen de la bandeja quedando desparramadas hasta tocar la orilla, el me mira detenidamente respira profundamente y rompe el silencio.

-Ese séptimo tiempo era letal mademoiselle, ¿que intentaba usted hacer conmigo esta noche? Laap Baat Juk, se preocupo usted por informarse que ese postre solo era servido en el octavo día del calendario lunar y por ser considerado un platillo exótico solo le era ofrecido como ultimo deseo a los condenados a muerte. ¿Sabia usted eso?-

Su mano derecha recorrió la suela del zapato, subió y acaricio el empeine de mi pie, prosiguió su andada por mi muslo, bajo de un solo recorrido hasta detenerse en mi tobillo. Volvió a subir hasta llegar a mi rodilla, entonces con sus dos manos acaricio mis muslos, sentí sus tibias manos tocar con suavidad, recorrer los pliegues de mis piernas, de un movimiento suave tiro de mis tobillos y me atrajo hacia el, su cara entre mis rodillas, sus labios carnosos con la mueca que se convierte en sonrisa, los ojos profundos y brillantes, su aliento cada vez mas cerca de mis rosados labios, de mis húmedos labios, su lengua recorriendo el nacimiento de mi pubis, un gemido escapo de mis labios y el eco lejano de sus voz me deseaba:
un Bon Appetit.

12 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Por Dios Bea, no me hagas esto! En un lapso clandestino robado a mi trabajo leí tu texto, es más lo releí, no porque no se entendiera, de hecho me pareció suculento, por eso lo leí varias veces más para alargar la sensación placentera. Estaba tan obnubilada que no había caído en cuenta que mi respiración se había agitado, mi espalda estaba erizada, dos tragos largos de mi té verde apenas aliviaron mis sedientos deseos. La reacción fue tan extrema, que mi editor se aproximó a mi escritorio, puso su mano en mi nuca y me preguntó- ¿Estás bien?
Y cómo explicarle, cómo decirle: No, descuida sólo se trató de un orgasmo.
Ay carajo, si sus iniciales fueran F.P. me cae que mandaba al diablo mi invisible ética profesional y el escritorio hubiera terminado más revuelto de lo que ya está

De verdad Bea, valió la pena la espera.

Beatrix dijo...

Querida nada me da mas gusto que saber que la espera valio la pena. Dejame decirte que lo que nadie se entero es que F.P. tardo en regresar por que le detuvieron la caja de las sandalias...lo acusaban de contrabando de pieles "exoticas". Pero al final el logro pagar en tiempo y forma como corresponde a un caballero de su porte, los aranceles necesarios para que las hermosisimas sandalias Dior de su querida apprenti llegaran a sus candorosos pies.

Y creeme ya son varias que andan en busca de su propio F.P.

Gracias por leerme, un beso.

Juan de Lobos dijo...

Mon Bijou, Beatrix, Un DE LI CIO SO relato, espero queestés pensando en publicarlo (tengo el contacto ideal para ello) te mando todo mi respeto, toda mi adiración y mi cariño hacia ti Bella Mujer.

Anónimo dijo...

Mi querida Bea:
¡.............! Me quedé helada, o inmóvil, no lo sé, pero al final, sin palabras. El texto es grandioso, fascinante, valió la pena quedarme sin uñas.

Solo le faltó un pequeño detallito, aquél "asuntito" qué tratamos en nuestra ultima conversación. Espero que al Sr. F.P no se le hayan olvidado las pedradas.

Un beso para usted, mi estimada Bea


LoraK

Anónimo dijo...

Impgesionante... vegdadegamente impgsionante!!!!

Con decigle que casi no puedo hablag, pogque no sabia ni como sepagagme del septimo sello.

Y digame una cosa, no quiege que pase ese YG pog usté paga veg esa pelicula de Begmann que aludo en el págafo de agiba.

En una de esas y hasta jugamos con la muegte... y en la cocina.

Le dejo un beso del tammannio de sus labios.

FP

Anónimo dijo...

Heartbeat...

no son celos, pero me preocupa severamente tu salud mental.

YG

Anónimo dijo...

Beat,

Fijate que eso de manejar en seis tiempos a un francesito mediocre como el tal FP, no me cae nada bien.

YO diria que tu título, como siempre si lleva relación con el final. Has puesto el dedo en la llaga de quienes ostentan querer ser estratagemas de
Bon Vivant. Diríase que paso a paso, el pobre FP, cenó a las mil maravillas y que las flores de loto son un aperitivo verdaderamente candoroso para lo que ofreces entre primer y sexto tiempo.

Atte,

El Gourmet Maya de la Dunia...

Anónimo dijo...

A eso me refiero Bea (silbando)


K.

Anónimo dijo...

Jay que dagle tambien todo su geconosimento a ese ggan amigo que sabe de leeg mucho, escgibib mas que bien y que entiende cuando ecziste una escgitoga como tu, un dulce de tgufa etegnamente beyo.

Me gefiego sin duda, a un motog de tu inspigacion, al maestgo Benito!!!

... ha tratado de acostumbrarse a la soledad de la ciudad. Busca a aquella mujer que en ensueños se le aparece y lo hace distinto a todos, no deja de pensar en ella, mientras come, mientras camina hacia su trabajo, mientras toca su guitarra, mientras escribe algo que aún no se atreve a llamar poesía.

FELICITACIONES A LOS DOS, SON BIENVENIDOS A MI COGAZON, PEGO SOBGETDO A COMEG LOS DOMINGOS.

MENU EN DIMANCHE...
TIEMPO SIN "TEMPO"
MINUETTO RAPIDO Y DE SUBITO.
Incluye cogazon de cogdego en sangre de lobos, tomo 1.


Merci Beacoup, surtout a mon LOUP.


FP.

Anónimo dijo...

Hay tanto que decir de este texto. Existe una sensualidad y un erotismo delicadamente aderezado en cada párrafo. Todo un tramado fino de ideas donde cada especia, cada ingrediente se va ablandando a vapor.
Ese misterio que siempre ha excitado hasta las mentes mas acobardadas, ese deseo intrínseco dalístico donde la comida juega un papel fundamental ya que es un preambulo de lo que al final va a ser un delicado festin de otra índole.
Ese disfrute estético, que pueden dar las letras con una carga semántica muy grande, no tiene comparación. Los ambientes se han logrado muy bien. Me gustó mucho el texto.
Fab

Beatrix dijo...

Caray! gracias de verdad a todos y todas por sus generosas palabras!

Les aseguro que todo lo aqui relatado es con enorme amor y pasion.

A ver a donde nos lleva todo esto...

Un beso,

Beatrix y F.P.

Anónimo dijo...

Espero que la lleve a seguir deleitándonos con suculentas historias, que además de abrir un apetito producen orgasmos mentales.

Saludos cordiales